Después de leer el texto, mi primera impresión es que los primeros cristianos fueron muy astutos. En lugar de tirar a la basura todo lo que se habían aprendido durante siglos, decidieron reciclarlo, pero dándole un giro. Entiendo que crearon su propio plan de estudios o paideia, usando como base la educación que ya existía.
Me parece que, aunque la Biblia era el corazón de todo, no descartaron por completo las áreas de estudio como la filosofía o la retórica. En lugar de eso, les dieron un nuevo propósito. La filosofía, por ejemplo, ya no se estudiaba solo para pensar sobre la vida, sino para tener herramientas que te ayudaran a comprender los textos sagrados. Es como si la retórica, que antes servía para hablar en público, ahora se usara para defender la fe.
Esta estrategia me parece muy inteligente y práctica. En lugar de crear todo desde cero, aprovecharon lo que ya tenían, pero lo ajustaron a sus necesidades. Esto demuestra que la educación, en manos de los cristianos, se convirtió en una herramienta para la fe, no en un fin en sí misma. La idea de que estas materias eran solo etapas preparatorias para poder entender la Biblia me confirma que el objetivo final era la teología, y no solo el conocimiento por el conocimiento. En resumen, fue una adaptación muy ingeniosa de la educación pagana para construir una base sólida para la educación cristiana.
Comments
Post a Comment